La ventana de enfrente

Mañana se cumple un mes de que estoy estrenando casa. El olor del departamento es de más de un mes y la fotografía al entrar es cada vez más clara.

Ahora tengo 4 macetas con diferentes tipos de plantas, dentro de esas 4 macetas tengo un árbol enano que se supone que es una bugambilia, pero ya comienzo mi tercer año viviendo sola y no ha dado lo que prometía dar.

Ramona es muy feliz en los jardines de la unidad, le gusta correr y brincar . . . incluso ya tiene un lugar favorito para hacer popó. 

Cada noche, después de salir a dar la vuelta con Ramona, abro la puerta del refrigerador para ver qué es lo que cenaré.

Cada noche, después de salir a dar la vuelta con Ramona, le pongo agua a una jarra transparente de plástico y riego mis plantas que están en cuatro macetas.

Cada noche, después de salir a dar la vuelta con Ramona, me meto a mi cuarto a ponerme la pijama.

Cada noche, después de salir a dar la vuelta con Ramona, veo a través de la ventana de la sala de mi nueva casa hacía la ventana que me queda de frente. Me gusta esa ventana, lo que hay detrás es la cocina alumbrada por una luz amarilla, una luz amarilla que la cubre una lámpara china de papel blanco.

La imagen es muy cálida,tan bonita como para verla antes de dormir.

Un día de mucha espera quiere decir esperar casi dos horas para poder desayunar. Un día de mucha espera quiere decir tomar un mal café para esperar desayunar. Un día de mucha espera quiere decir buscar un lugar con sombra para cubrirte del sol para poder desayunar.

Pero un día de mucha espera también quiere decir que al final comes delicioso con buena compañía.

Estándares de vida

Hoy por la mañana me dijeron que la vida tiene estándares, y que aparentemente estoy mal por cuestionarlos y creer que puedo hacer lo que yo quiero. En algún momento alguien me dijo, que cuando una oración sea afirmativa o negativa comienza con juicios de valor, en automático puede convertirse en autoritaria . . . el juicio de valor de esta mañana fue: estás mal por cuestionarlos.

Quisiera platicarles el porqué cuestione estos supuestos estándares. El noticiero de esta mañana pasó la noticia que en España la Federación de Fútbol (soccer) y la verdad ni sé si sea federación, pero bueno, el chiste fue que se pintaba de rosa para apoyar el día Internacional de la niña – que ayer 11 de octubre se celebró – y yo contesté que porqué lo pintaban de rosa y no de otro color, que es tonto seguir encasillando a las mujeres en tanto el color rosa y la respuesta fue la que ya mencioné en el primer párrafo.

Me cuestionó que si entonces está mal que se asociará el sida con el rojo, o diferentes colores con diferentes causas, en lo personal la «platica» se tornó diferente desde un principio, para mi no es lo mismo asignar un color a una causa que asignar un color a un sexo. Para mi no es correcto que sigamos repitiendo la etiqueta de encasillar lo que es para las mujeres dentro del color rosa, independientemente que, en esta platica, haya sido para representar la causa del día internacional de las niñas.

Incluso ahí, desde mi punto de vista, se está haciendo énfasis en el sexo. 

La platica concluyó con un silencio incómodo, porque para mi no está MAL cuestionar lo que son los estándares que tiene la sociedad, el cuestionar no lastima ni violenta el derecho del otro y de la otra, más bien respeta el derecho a la libre expresión.

Pero como todo en esta vida, la manera de observarla es distinta desde diferentes retinas.